martes, 24 de mayo de 2011

La felicidad está en todas partes.


Los cahuices o cahuixes o cauices o X'kaus (sinceramente no sé ni cómo se escribe) son los pájaros más comunes y corrientes en mi ciudad, son casi una plaga. Aunque no creo que a muchos molesten no pensé que pudieran dar alegría a alguien.

No es por presumir pero mi sobrina de 4 años parece una princesa, pero más bonita que las de los cuentos y la luz que despide su rostro demuestra la alegría por todo lo que va descubriendo.

Solo una mente limpia y buena como la de mi sobrina podría descubrir la felicidad en los pájaros antes mencionados. Resulta que mi sobrina sale en la mañana al jardín de su casa y descubre que unos cuantos cahuices están posados en un arbolito. Corriendo de alegría va a decirle a su papá:

- ¡Papá papá! ¿ya viste los pajaritos que están en el jardín? ¿Son míos, verdad?

Bueno eso puede parecer muy gracioso pero es la verdadera felicidad; poder disfrutar lo que la naturaleza nos da. De hecho pienso que esa es la felicidad que sienten los monjes que viven alejados de las zonas urbanas disfrutando todo lo natural que encuentran a su paso.

Otro punto para ser feliz es poder disfrutar algo que no sea nuestro, puede ser que no podamos comprar un auto pero lo podemos rentar, ir a un buen hotel, ir a un buen restaurante, etc. El punto es disfrutarlo en el momento sin querer ser dueños de todo. Hay que recurrir a la imaginación.

Ya para terminar les platico que en el momento que estaban llevando a mi sobrina a la escuela pasaban por un parque y vio a “sus pájaros” y le dice a su papá:

- ¡Mira papá! Mis pajaritos me están acompañando a la escuela.


1 comentario:

  1. tienes razón!
    en Colombia esos pájaros se llaman María Mulatas ... no sé cómo se les dice a los machos jejjeje y no tienen palomas???

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